martes, 25 de noviembre de 2014

El Maestro.. Roberto Challe

.... Muchas veces se dice que el futbol no tiene memoria, y es verdad, sin embargo hay quienes nos resistimos a pensar de esa manera, por una simple cuestión de gratitud a quien o quienes nos dejaron recuerdos y emociones imborrables en el deporte más popular del planeta y que, para mi, tienen ya el grado de leyendas del futbol mundial.

      En este apartado, un mito viviente de nuestro futbol peruano es el Maestro Roberto Challe Olarte, el "Niño Terrible", para mí el último gran estratega que tuvo el futbol peruano, luego explicaré porque.. pero antes de haber sido entrenador, Challe fue un gran jugador de futbol, en esa legendaria selección peruana de los 70 junto a otros ilustres de la época, llevaron ese estilo del futbol peruano, de toque exquisito,  a lo más alto del panorama internacional, no tuve el privilegio de verlo en directo pero en mis interminables charlas con mi viejo sobre futbol, pude percibir, como un aliancista de pro, como era mi padre, se rendía ante el talento de aquel todocampista adelantado a su época, y que mezcló en su futbol magia y picardía, rasgo innegable de un estilo y de una forma de sentir el futbol de todo un país, que se rendió a aquella gesta de desesperar al mismisimo Perfumo, pintandole la cara en su propio país, en aquel histórico Argentina-Perú del 69, en donde tuvo el descaro de ponerle la pelota en la cabeza, literalmente, con una especie de respeto burlón, ante los ojos de todo un pueblo argentino, atónito ante semejante afrenta,   para meterse el partido en el bolsillo y la clasificación al mundial de México 70, escribiendo una de las hazañas más grande del Perú futbolero.

Porque así siempre fue el Maestro, un improvisado, en el buen sentido, un antisistema, un rebelde con causa, fiel a sus ideas y hombre de pueblo, criollo y cercano.. un ídolo de verdad, con virtudes de lider más por cualidades que por imposiciones, llevó al Perú, ya como entrenador, a una de las eliminatorias mundialistas más dramáticas que se han vivido,  ante la poderosa Argentina de un tal Diego Armando Maradona, a la postre Campeón Mundial de México 86.

Por aquel 1985, Perú tenía una gran generación de jugadores, curtidos en mil batallas por campos sudamericanos y europeos, al ritmo de los últimos versos del "poeta de la zurda" César Cueto, y un equipo de gala de tres cuartos para arriba, Cueto, Velazquez, Uribe, Malasquez, Oblitas, La Rosa y el gran Barbadillo que la rompía en el Udinese... talento y magia pura, equipo en el que el Maestro plasmó ese gen competitivo que tanto añoramos en estos días de futbol en nuestras selecciones. Nos tocó enfrentarnos a una Argentina en el último partido de clasificación, quizás una de las peores que se recuerden técnicamente pero que tenían al mejor jugador de todos los tiempos . Maradona.
El maestro Challe, sacó del repertorio un sistema insólito... Challe sabedor de que Perú era superior en técnica, dispuso sacrificar a Reyna, un mediocampista tacticamente muy disciplinado y generoso en el despliegue para que persiguiera, literalmente, por todo el campo a Maradona, impidiendo en todo momento que participe en el juego, era su sombra, un marcaje hombre a hombre en toda regla. Es evidente que ambos equipos quedaron con 10 siendo 22 en el terreno de juego, pero lógicamente Argentina perdía más que nuestra selección, anulado Diego, Perú dominó, en el partido de ida ganamos 1-0 con gol de Oblitas..El Maestro se volvió a comer a los Argentinos, y quedó otra vez en la historia aquella estrategía que nunca más se vió a esos niveles de competición.  En el partido de vuelta volvió a utilizar la misma estrategia, con un árbitro menos permisivo con los nuestros y por contra el tristemente recordado Camino sacó del partido a Navarro... el final de la historia ya la conocemos, Perú estaba clasificado hasta que en banda se escapa Maradona de Reyna, la única vez, previo resbalón de este por el estado del terreno de juego..el 10 saca el centro mordido al área, barullo y empujón de Pasarella a Chirinos y gol Argentino.. Adiós al sueño mundialista...

    Con el transcurrir de los años uno recuerda con emoción aquellos momentos, pues fue el claro ejemplo que en futbol no se gana por merecimientos, lo cierto es que desde aquella época no hemos vuelto a estar tan cerca de una cita mundialista, razón de más para valorar el enorme trabajo realizado por el profe Challe y su equipo técnico y observo con pena como no hemos podido ser capaces de dar continuidad a ese trabajo, adaptándolo a los nuevos tiempos y a esa evolución y tendencia de la que nos hemos quedado obsoletos con respecto a otros países que si hicieron un trabajo serio y aprendieron de sus errores y de su historia.
    Por eso ayer, que su hijo Roberto, amigo mio, con el que coincidí cuando jugaba al futbol, nos recordaba que cumplía un año más de vida recordé el enorme legado dejado por su padre, la historia que escribió como jugador y entrenador en nuestro futbol, y espero que nos siga regalando su sabiduría por muchos años..FELIZ CUMPLEAÑOS MAESTRO.
   
      
     
   

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