.... Se retira uno de los grandes, leyenda viva de un Real Madrid que se quedó en deuda de no haberle tributado una despedida con todos los honores, como se merecen los que hacen historia, la que escribió Raúl González Blanco en todos los años que vistió de blanco, entre Ligas, Champions, Intercontinentales, etc.
Raúl, heredero del 7 de Butrageño, debutó a los 17 años de la mano de Jorge Valdano, al que dejó la celebre frase "Mister si quiere ganar el partido pongame" , porque así era él, un ganador, goleador nato, hábil dentro de área, a pesar de no ser potente físicamente, un zurdo que llevaba el gol en la sangre, y que desplegaba liderazgo desde el talento y la admiración de todos los compañeros ilustres con los que compartió su carrera, Redondo, Roberto carlos, Ronaldo, Zidane, Figo, Beckham, Seedorf, etc, todos se rindieron ante el profesionalismo y el talento del 7 blanco.
El futbol le debe un balón de oro, cuando lo ganó Owen era su año, pero más allá de premios individuales, Raúl supo representar todos y cada uno de los valores que profesa un club como el Real Madrid, pues era la antítesis de tanto jugador mercenario que transita por el futbol de élite, por ser defensor de un escudo y una idea de club dificil de ver en estos tiempos que corren.
La selección es otro capítulo en su debe, miembro de una gran generación de futbolistas, que no pudieron plasmar en resultados toda la fama con la que siempre llegaba precedida ante cualquier cita mundialista y europea y que para más inri, precisamente cuando Luis Aragonés decide prescindir de él, es cuando empieza el ciclo glorioso de la selección española por todos conocida. Cosas que tiene el futbol.
Desde esta tribuna, no nos queda más que darle las GRACIAS, por todos estos años de futbol, por esa manera de entender este deporte desde el sentimiento por unos colores, expresiones de fidelidad muy venidas a menos por la comercialización que invade al futbol de élite, y por demostrarnos que hay quienes creen en ciertos valores que nunca se deben perder y señores, precisamente eso, es lo que siempre representó el eterno capitán .. EL GRAN RAÚL.
No podría estar más de acuerdo contigo. Raúl, el ejemplo de que, en ocasiones, el amor por un escudo pesa más que una infinita ristra de ceros. Probablemente recibiese ofertas millonarias de equipos de élite que nunca llegaremos a saber pero él siempre diría que no. El único pero que ponerle a su extraordinaria carrera, que aun así no es ni fallo suyo, es la manera en la que se despidió del club que le vio crecer y convertirse en uno de los mejores siete del Madrid.
ResponderEliminarEn cuanto a la selección, creo que L. Aragonés lo hizo bien apartándole de una convocatoria que no era la suya. Era una convocatoria de una nueva era que nos trajo dos eurocopas y un mundial. Él tuvo su oportunidad y, por desgracia, no fue capaz de obtener ningún logro con la roja que quedan más que compensados con el palmarés que consiguió con el Madrid.
Muy buena entrada dedicada "al que nunca hace nada"
Saludos!